miércoles, 15 de julio de 2009

"No había inocentes"

"Abrimos fuego y no hacemos preguntas". "Nos dijeron que debíamos arrasar la mayor parte posible de nuestra zona". "Mi comandante me dijo, medio sonriendo, medio serio, que esas demoliciones podrían añadirse a su lista de crímenes de guerra". "Si alguna vez nos hablaron de inocentes, fue para decirnos que no había inocentes". Es el turno de los soldados israelíes. Dirigentes, académicos y analistas hebreos; políticos y civiles palestinos; organizaciones no gubernamentales internacionales y locales; Naciones Unidas. Todos han investigado y extraído conclusiones de la guerra que el Ejército israelí lanzó contra Gaza el invierno pasado. ¿Guerra? "¿Es realmente plausible denominar batallas al bombardeo con artillería y tanques, y al fuego lanzado desde helicópteros y aviones?", se pregunta el abogado Michael Sfard, defensor ante los tribunales israelíes de muchas víctimas palestinas del Ejército. "Es el ataque más duro que ha infligido el Estado de Israel a una zona urbana densamente poblada por civiles", añade Sfard. Más información

1 comentario:

  1. Más par ael archivo de la banalidad del mal. En la película Z 32 (que se pasará en el mes de septiembre en el ciclo "¿Paz o pax en Medio Oriente?") el entrevistado cuenta que cualquier hombre mayor de 5 años era considerado una amenaza y había que dispararle. Testimonios de "rompiendo el silencio" se encuentran aquí:
    www.shovrimshtika.org

    Ilan Pappé encore... ¿es posible seguir excluyendo con gran escándalo la expresión "limpieza étnica"?
    Nos acusa(ro)n de mezclar Alemania en los 30 y 40 e Israel en el siglo XXI, ni Levinas se salva a veces. Hasta Abraham Burg escribió un libro hace unos años que se titula "Vencer a Hitler".

    En otro orden de cosas: el sargento Amir con coraje da testimonio de este horror. Habla de "mesianismo"... ¿En qué se transformó la lengua de los profetas?
    En 1934 Joseph Roth escribía: "(...) promete honrar el pasado y pronostica un futuro (porque sabe que tras él no habrá ya ninguno), asegura que ayudará a salvar la humanidad y el humanitarismo y, al mismo tiempo, liquida a los hombres, como si su lengua engañosa no supiera lo que perpetra su mano asesina"

    El testigo de Z 32 busca el perdón, exhuma la palabra absolución para recuperarla como tarea infinita.

    ResponderEliminar